Como ya he dicho, antes de comenzar a utilizar los métodos para buscar esa película que no recuerdas, debes tener la mayor cantidad posible de información. Cada retazo de tu memoria nos sirve. Mientras más coherentes y precisos, mejor. Piensa con todas tus fuerzas: ¿De qué año más o menos es tu película? ¿De qué genero? ¿Recuerdas algún actor que salga en ella? ¿Puedes escuchar algún fragmento de la banda sonora? ¿Reconoces alguna canción? ¿Eres capaz de describir, aunque sea, un fragmento de alguna de las escenas? ¡PIENSA! Escribe todo lo que recuerdas en algún lugar y comienza a utilizar los métodos debajo. Van de los más simples, a los más complicados y engorrosos. Si uno no te sirve, pasa al siguiente.